domingo, 3 de junio de 2018

LOS EXPLORADORES VOLVIERON. RESÚMEN DE LOS ULTIMOS VIAJES

VIAJES  DE ESTOS ÚLTIMOS AÑOS

Mucho tiempo pasó desde la última entrada.
Desde enero de  2013 hemos hechos paseos interesantes, fuimos a Chile, nuestra primera experiencia internacional. Estuvimos por el litoral, expresamente por Entre Ríos. Visitamos un par de veces a Rosario. Y lo mejor de todo viajamos dos veces al NOA,  la primera vez como viaje aniversario, la segunda vez, mas extenso, como viaje con amigos.
Todas experiencias maravillosas y llenas de anécdotas y momentos memorables. También con situaciones de tensión, pero que sin ellas tampoco serian verdaderos viajes exploratorios,
Por ello en esta entrada va un breve resumen de todo lo que viajamos estos años e inauguramos a partir de esta un nuevo ciclo de nuestro blog. Sigannos vamos a explorar!!!!!

MARZO DE 2014, DESPUÉS DEL FIN DE SEMANA LARGO NOS FUIMOS A CHILE

Si, al revés de todos los que volvían nosotros nos íbamos. Maravillosa idea, sin congestionamiento sin demoras, pero con lluvia
Salimos de casa como siempre de madrugada a las 5:30 de la mañana rumbo a Río IV, aun no estaba la autovía 36, de allí nos encaminamos  hacia la provincia de San Luis, de allí rumbo a Mendoza, tierra del sol y del buen vino. Es un decir lo del buen vino no lo ponemos en duda, lo del sol estaba por verse. Todo nuestro paso por la hermosa provincia de Mendoza fue húmedo y muy mojado, que manera de llover. Luego nos enteramos que era inusual tanta agua y muchos menos en esa época.
Llegando a Mendoza lluviosa


El cruce de la cordillera fue de lo más penoso, en la zona de los túneles, viajabamos con poca visibilidad a causa del agua, los paisajes se veían detrás de una neblina que no nos de
jaba apreciar la imponente cordillera. Llegamos a Las Cuevas con una nevisca copiosa y mucho frío.
Dique Potrerillos

Los Túneles

Hermosos Andes

Cómo emociona la Celeste y Blanca

La aduana la pasamos sin problemas porque hicimos los trámites antes, algunas consideraciones a tener en cuenta:


  • Los menores de 21 años son menores de edad para la legislación chilena, por lo tanto debe viajar con la partida de nacimiento ademas del DNI, y si va sin sus padres con una autorización certificada ante escribano o Juez de Paz. Nuestro hijo Martín, en ese momento con 20, se iba a quedar en la aduana por falta de su partida. Ojo en ningun lado dice a qué edad se considera la mayoría de edad entre los requisitos. Fue puro olfato materno, jajaja.
  • El auto necesita un permiso de entrada y salida y también un seguro para circular en Chile. Nosotros teníamos la póliza de La Segunda para todo el Mercosur.
  • No se pueden ingresar alimentos frescos, nosotros llevamos arroz fideos, yerba, cafe y algunas latas y no tuvimos problema
  • La mayoría de la gente se sentía apunada, es recomendable tomar precauciones al respecto, al llegar a Guardia Vieja, 1º peaje chileno los síntomas ya se habían ido.
Llegando a Chile


Llegamos a Guardia Vieja, para ingresar no se paga peaje, y fuimos a nuestro alojamiento. No es esta zona nada recomendable para alquilar al turismo, es zona minera y deja mucho que desear. Luego de mucho recorrer nos alojamos en el Hostel Atacama de Santiago que tanto los empleados como sus huéspedes nos trataron muy bien. Habitación con baño privado y desayuno para 4 u$a 75, no tienen estacionamiento.

Frambuesas que compramos en Santiago y disfrutamos en El Tabo

Al día siguiente paseamos por Santiago y después de almorzar unas super empanadas de pino (carne) emprendimos la marcha hacia el mar, precisamente a El Tabo, pequeña población costera que se encontraba en desarrollo, su gente muy amable y sus playas muy íntimas, salvo que el Pacífico nos sorprendió con una ola magistral que inundó nuestra canasta del mate, asesino al celular de Estrella y a todos nos mojó. Allí alquilamos una cabaña que nos salio en ese momento $500, alrededor de u$a45, muy cómoda con heladera, agua caliente, pero era una casilla prefabricada, tenia detalles. Para pasar la noche nos sirvió porque ya al tercer día emprendimos el regreso a casa tras un largo paseo por el litoral chileno hasta Viña del Mar. Tengan en cuenta el valor de los peajes y reserven los tickets porque suele haber peajes cercanos de otras rutas que sino pueden demostrar que ya pagaron se los vuelven a cobrar, avivados hay en todas partes.  Hablando de avivados en la última estación de servicio chilena nos pasaron la tarjeta dos veces, tengan cuidado.
Ya en Argentina, merendamos en Uspallata unos riquísimos sándwiches de pan casero tostado y chocolate, muy gratificante después del largo día.
Nuestro Primer encuentro con el Oceáno Pacifico

Antes del encontronazo con el Pacífico

Volviendo a casa, en Los Caracoles  chilenos

Que linda que es la casa de uno, hola Argentina

En Uspallata deleitandonos con unos excelentes sándwiches



CONTINUARÁ...

















jueves, 4 de abril de 2013

Cuatro días en San Luis y uno de yapa en Córdoba: Cuarto y quinto día.


Cuarto y quinto día.


Fecha:25 de diciembre de 2012
Km Recorridos: 832 km
Duración: 5 días
Transporte: Nuestro Renault 12 modelo 92,
Integrantes: María Julia y Néstor
Equipo: Carpa, bolsa de dormir, colchón inflable, banquetas de playa, banquitos plásticos  cocina a gas, cartuchos de gas, heladera, iluminación LED, cámara Nikon p510, alimentos de todo tipo, 
Clima:Soleado los cinco días con algunas noches muy frías





Luego del reparador descanso, volvimos a madrugar y a las 6 ya estábamos levantando el campamento con rumbo hacia la zona de Trapiche, aunque para ello, era necesario cruzar la sierra hacia el oriente. El tema era por qué paso, ya que de los tres que conocíamos por referencias, el más empinado era el que habíamos pasado el día anterior, el siguiente era bastante complejo y el tercero muy suave, en las cercanías de San Luis ciudad. Decidimos hacer Nogolí - Río Grande, el más difícil y antes de las seis y media, ya estábamos trepando hacia el este. La premisa era que ante ninguna circunstancia, forzaríamos al auto. Los primeros kilómetros son tranquilos, pero luego la cosa se volvió muy empinada y si bien las trepadas no son obstáculo para el auto, el motor realiza un gran esfuerzo. El nuestro carece de electroventilador, es decir la refrigeración del agua es con ventilador mecánico y a poca velocidad, pocas vueltas de ventilador. A poco de subir, la temperatura ya había trepado por demás, por lo que decidimos volver y buscar los otros pasos.




Pasamos Nogolí y tomamos por la ruta provincial 3, pero a los pocos km tuvimos que desviar  a la nacional 147, ya que la 3 estaba cortada, por que la están transformando en autovía. Acá ya se está en la llanura y siempre se tiene la sierra de San Luis a la izquierda. En cierto punto doblamos por la tierra hacia Suyuque Viejo, pero un error que cometimos en un desvío, nos llevó sin que lo tuviéramos planeado, a la nueva ciudad de La Punta. De pronto, transitando por la tierra, Néstor se vió sorprendido por la presencia del mismísimo Cabildo de Buenos Aires, pero completo, sin las partes que demolieron al abrir la diagonal y la Avenida de Mayo. La sorpresa y la perplejidad fueron mayúsculas.



Esta foto captó la perplejidad que sentíamos ante el hermosos edificio




Soldado Patricio de yeso o telgopor o madera o carne y hueso...
Estacionamos en el lugar asignado a los autos, a pesar de que estaba a unos 200 metros del edificio y no se veía a nadie en varios cientos de metros a la redonda. Nos acercamos sintiendo una sensación de irrealidad o de surrealismo. Faltaba que se viera uno de esos relojes arrugados de Dalí... Luego averiguamos que el complejo se levantó en ocasión del bicentenario de nuestra libertad y que en su momento se reunieron allí unas 20000 personas para presenciar el acontecimiento.
Intentamos visitar el interior del monumento, pero no logramos que nadie nos atendiera. Era muy temprano y tal vez estuviéramos fuera de horario. Pudimos comprobar que, a pesar de lo exacto de la réplica, los edificios quitados de su contexto, su entorno histórico social, pierden parte de su significado, se modifica el código comunicacional, se vuelven extraños y hasta transmiten cierta inseguridad... notable...

Seguimos viaje y conocimos una extraña e interesante ciudad, que posee la Universidad, estudios de cine, barrio de astronomía (con casas de arquitectura de vanguardia) y un estadio de fútbol. Las diferentes y abundantes autovías, están sumamente cuidadas y ornamentadas con gran cantidad de estatuas y grupos escultóricos. Esta parte de la provincia, urbanizada, es muy linda y original.


Fuentes y estatuas en el Gran San Luis




Entrada a El Trapiche

 Finalmente cruzamos la sierra por el paso más cercano a la ciudad capital. No es nuestra característica, pero estábamos a esa altura extremadamente cansados.

Todo el gran San Luis, para quien no lo conoce, es un conglomerado de rutas, autovías, rotondas, etc, a veces no muy bien indicadas. Por eso nos resulta difícil relatar cuáles fueron las vueltas que dimos. En un momento pasamos tres veces por el mismo lugar. Nos llamó la atención la conformación de El Trapiche, ya que el pueblo posee gran cantidad de puentes a diferentes niveles. Como en un video juego, pasábamos por uno y al cruzar el siguiente, veíamos el anterior varios metros más abajo o arriba, etc. Finalmente logramos encontrar la estación de servicio y llenamos el tanque, ya que nuestras existencias habían disminuido a niveles alarmantes y no cruzábamos ninguna estación.
Recorrimos Siete Cajones, la reserva natural y otros parajes, pero no logramos encontrar un lugar que nos sedujera, a pesar de la belleza de todos.

Finalmente decidimos volver a Río Grande y ver qué se podía encontrar por allí.

A la salida del dique, encontramos un cartel de Camping y decidimos explorar. El lugar era hermoso y lo mejor, no había nadie, por lo que inmediatamente decidimos pasar el día allí.




Benteveo o Bicho Feo (pitangus sulphuratus)

El lugar es muy lindo, prolijo y atendido por una cordial y amable familia. Allí pusimos la carpa y disfrutamos del agua y las bellezas del río Grande.


Julia descansando


Jote cabeza negra (coragyps atratus)
Gracias a la toma de 220 voltios que tenía el camping, pudimos normalizar la carga de las baterías de la máquina, ya que teniendo dos y teniendo una autonomía de unas 300 fotos cada una, se nos complicaba tener continuidad. Sufrimos un par de baches sin fotos, por lo que deberíamos conseguir una tercer batería.



El dique Aguero
A la tarde, mientras Néstor dormía sober la arena de la playa, Julia recorrió parte del río, encontrando lugares muy lindos. Luego, al anochecer, recorrieron los alrededores del camping, lugares sumamente bellos.

El camping

Ni La Gioconda ni el Arno

El campamento

Julia estudiando
A la noche Néstor preparó una sopa cpn algunas cositas para picar y a la medianoche se apagaron las luces.


Quinto día


Al día siguiente, antes de las seis, ya estábamos de pie, ya para abandonar la provincia de San LUis y pasar otro día ya en Córodoba.

Verificamos el mapa y temprano partimos hacia el conocido La Toma con la intención de desayunar allí.
Salimos hacia El VOlcan y de allí tomamos la autovía hacia La Toma y el eterno GNC. Todo el camino fuimos viendo árboles y plantas ornamentales además de algunas esculturas.


Saliendo de Río Grande

Dique La FLorida
Escultura sobre el elemento Aire





Todo resultaba muy lindo y equilibrado. Pero tantas cosas y obras para escasos autos que circulan, incluso en las cercanías de la ciudad de San Luis.

Otra escultura

Rumbo a La Toma

Volcán El Morro
Cuando llegamos a La Toma, la cola para cargar gas era de unos 20 autos. Estuvimos cerca de 90 minutos esperando sin ningún problema, ya que aprovechamos para desayunar y ver el entorno.

Julia al volante



Rumbo a Las Albahacas

Ingreso de tierra a Las Albahacas


A partir de La Toma, Julia se hizo cargo del volante. Entramos en Córdoba en La Punilla, pasamos Achiras y a los pocos km desviamos en nuestra ruta 23.

La ruta de acceso a Las albahacas es de tierra y en buenas condiciones. Son unos nueve km hasta que se llega a las primeras casas. El pueblo es muy lindo con calles serpenteantes y un río espectacular. Lamentablemente (para nosotros) era sábado al medio día y estaba desbordado de gente. Además a la noche había un baile con conjunto musical en vivo.





El río es hermoso, pero había cientos de personas. El camping municipal estaba abarrotado; se nota que el lugar es muy popular, seguramente en Río Cuarto. Nos desplazamos hacia un pueblo cercano, en busca de mayor tranquilidad, pero nos recibieron con una barrera en la entrada dode cobraban una entrada bastante cara. El camping era horroroso. Tampoco se veían lugares para acampar fuera de las instalaciones turísticas. Seguramente los hay, pero nosotros, entre el calor y el cansancio, no los encontramos. Volvimos a Las albahacas y fuimos a parar a un modesto camping, que recién abría sus puertas. A todo esto, la música a todo volumen de carpas, kioscos, etc, arruinaban (según nuestros parámetros de descanso poco populares) la belleza del lugar. Pero evidentemente en las Albahacas venden ese estilo y la gente en general busca eso.
Luego de comer algo rápido, intentar descansar era una utopía, por lo que pasamos toda la tarde sumergidos en el río.